Grave denuncia en Córdoba: investigan la muerte de un hombre tras un confuso episodio con la policía

Un hombre falleció esta madrugada en una estación de servicio de la capital cordobesa, en medio de un incidente cuya versión oficial se encuentra en entredicho. La familia responsabiliza a la Policía de Córdoba, mientras emergen videos que muestran la secuencia de su detención. El hecho ocurrió en la intersección de Octavio Pinto y Mariano Castex y ha desatado una fuerte controversia sobre el accionar policial.

Según el relato de la esposa del fallecido, la víctima llegó al lugar para cargar combustible pero, en un estado de nerviosismo, olvidó el dinero para pagar. Fue entonces cuando la Policía la contactó para que abonara la deuda, sin embargo, al llegar se encontró con una escena que, asegura, terminó siendo fatal. Según su testimonio, los efectivos lo redujeron “entre cuatro o cinco policías” mientras él insistía en que se sentía mal. “Me lo iban a matar”, advirtió la mujer, asegurando que los agentes hicieron caso omiso a sus súplicas.

Los testigos del incidente, en particular vecinos de la zona, comenzaron a difundir videos en redes sociales que muestran la intervención de los uniformados. Las imágenes refuerzan la versión de que el hombre sufrió un trato violento durante su arresto, aunque las autoridades aún no han confirmado si existe una autopsia preliminar que pueda determinar las causas exactas de su muerte.

La intervención policial en Córdoba ha sido motivo de cuestionamientos en reiteradas ocasiones, con denuncias previas por uso excesivo de la fuerza y manipulación de procedimientos. En un contexto de creciente tensión social, este episodio vuelve a situar a la fuerza de seguridad en el ojo de la tormenta y pone en jaque su accionar en situaciones de conflicto. Las autoridades provinciales han manifestado que se iniciará una investigación interna, aunque la familia ya exige la intervención del Poder Judicial para esclarecer lo ocurrido.

Mientras tanto, la difusión de las imágenes y testimonios ha provocado una ola de indignación en redes sociales, con llamados a movilización y reclamos por un cambio en el protocolo policial. No es la primera vez que situaciones similares terminan en tragedia, y el temor de que esto se diluya en la burocracia judicial alimenta el enojo de quienes exigen justicia.