Axel Kicillof reanuda negociaciones en la Legislatura bonaerense para aprobar el presupuesto 2025, en medio de tensiones con la oposición. El conflicto se centra en la autorización de un nuevo endeudamiento, necesario para financiar proyectos clave en infraestructura y servicios. La sesión de hoy será crucial para definir el futuro político y económico de la provincia.[Collection]
Kicillof negocia el presupuesto 2025 en la Legislatura bonaerense
Tras el fallido intento de la semana pasada, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, reanuda hoy las negociaciones con la Legislatura bonaerense con el objetivo de destrabar la discusión del presupuesto 2025 y el paquete fiscal e impositivo correspondiente. La instancia, que se anticipa compleja, está marcada por una creciente tensión entre el oficialismo y las fuerzas opositoras, especialmente el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR), debido a los pedidos de autorización para un nuevo endeudamiento.
Un contexto áspero de negociaciones
La aprobación de la “ley de leyes”, como se denomina al presupuesto en el ámbito legislativo, se ha visto trabada por una serie de desacuerdos que evidenciaron un escenario de fragmentación política. Como sucedió en el intento anterior, las tratativas entre el Frente de Todos y la oposición se complicaron por las demandas cruzadas. Según fuentes oficiales, el núcleo del conflicto radica en la autorización de un endeudamiento adicional, el cual requiere de una mayoría especial que, en este caso, depende del consenso con otras fuerzas políticas.
Los bloques del PRO y la UCR, principales opositores en la Legislatura bonaerense, han expresado reparos sobre varios aspectos del proyecto. Los referentes opositores han condicionado su apoyo a la inclusión de garantías de inversión en obras específicas para municipios liderados por intendentes de sus alianzas. “No nos oponemos a un endeudamiento per se, pero necesitamos que estos recursos se traduzcan en soluciones concretas para los bonaerenses”, afirmó un dirigente del PRO que pidió no ser identificado.
El oficialismo busca consenso a contrarreloj
Por su parte, el gobierno provincial aseguró que el proyecto está diseñado para garantizar la continuidad de proyectos estratégicos en infraestructura, salud, educación y seguridad. En relación con el pedido de endeudamiento, señalaron que los fondos se destinarán en gran medida a obras públicas indispensables y a programas sociales prioritarios. Un integrante cercano al círculo de Kicillof advirtió que “sin esta herramienta, será muy difícil sostener el ritmo de crecimiento que la provincia ha logrado en los últimos años”.
Las sesiones legislativas de fin de año suelen ser escenarios de intensas negociaciones, y este caso no es la excepción. Durante el último intento, las diferencias internas en el bloque opositor también complicaron el avance del debate, según admitieron algunos legisladores. Con ese antecedente en mente, el Frente de Todos buscará explotar las fisuras en la bancada opositora para lograr la aprobación de su iniciativa.
Impacto político y económico en juego
El resultado de esta negociación tiene implicancias políticas y económicas de alto impacto. La provincia de Buenos Aires concentra casi el 40% de la población argentina y representa el distrito con mayor incidencia en la estructura financiera del país, por lo que las decisiones sobre el presupuesto bonaerense tienen repercusiones nacionales.
Al margen de las tensiones políticas, la aprobación de la “ley de leyes” también podría afectar la relación entre Kicillof y los intendentes, tanto oficialistas como opositores. Muchos alcaldes buscan garantizar partidas específicas para sus municipios, lo que añade otra capa de complejidad a la discusión de los artículos del presupuesto y del paquete fiscal e impositivo.
Un desafío para el Frente de Todos
Para el Frente de Todos, la aprobación del presupuesto representa una prueba crucial de gobernabilidad, especialmente de cara a un 2025 que se anticipa desafiante en términos financieros y electorales. Por este motivo, Kicillof y su equipo han intensificado las reuniones y contactos con legisladores oficialistas y opositores para limar asperezas y acercar posiciones.
De lograr los acuerdos necesarios, la provincia podría avanzar con una hoja de ruta presupuestaria sólida para el próximo año, incluyendo partidas destinadas a infraestructura, salud y programas sociales. Sin embargo, cualquier demora o rechazo en la Legislatura pondrá en peligro la ejecución de varios proyectos estratégicos y podría derivar en una crisis de confianza en el seno del gobierno provincial.
La sesión, programada para hoy, será clave para definir el futuro político y económico inmediato de la provincia de Buenos Aires. Las expectativas están puestas en si Kicillof logrará articular un consenso que destrabe el conflicto con la oposición y permita avanzar con las medidas previstas en el proyecto de presupuesto.
Fuente: @LANACION