La Unión Cívica Radical (UCR) se reunió en La Plata para evaluar las PASO y planificar estrategias para las elecciones generales. Con más de 3,000 asistentes, los líderes reafirmaron la necesidad de unidad dentro de Juntos por el Cambio y la importancia de mantener la identidad radical frente a Javier Milei y sus propuestas.
La cumbre de la UCR en La Plata: un espacio de deliberación interna
El sábado, la Unión Cívica Radical (UCR) bonaerense se reunió en el Club Atenas de La Plata en un encuentro que congregó a dirigentes y militantes. Este evento fue una oportunidad clave para analizar los resultados de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) y planificar las estrategias de cara a las generales del próximo 22 de octubre. Con más de 3.000 personas presentes, el encuentro destacó por la asistencia de figuras sobresalientes dentro de la estructura partidaria, como el gobernador de Jujuy y candidato presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), Gerardo Morales, y el candidato a vicepresidente, Maximiliano Abad.
La reunión no solo sirvió para deliberar sobre el futuro político inmediato del partido, sino también para reforzar su posicionamiento en un momento en que su relevancia dentro del ecosistema electoral se encuentra en pleno escrutinio. La UCR, uno de los pilares históricos de Juntos por el Cambio, enfrenta desafíos tanto desde el interior de su coalición como desde el exterior, principalmente por la irrupción de Javier Milei y su partido, La Libertad Avanza, en el panorama político nacional.
Los ejes discutidos: fortalecimiento, Milei y el rol dentro de JxC
Durante el acto, los discursos se centraron en dos ejes principales: la necesidad de consolidar la identidad del radicalismo en un contexto de transformaciones y la relación del partido con los otros componentes de JxC. En este sentido, tanto Morales como otros dirigentes enfatizaron la importancia de mantener la unidad dentro de la coalición opositora mientras se define el camino hacia la segunda vuelta presidencial.
“Nunca voy a olvidar quiénes somos y de dónde venimos”, afirmó Morales, en un intento por reforzar la percepción de la UCR como un partido con legado y valores sólidos. La declaración fue acompañada por críticas indirectas dirigidas a Javier Milei, a quien muchos dentro del espacio consideran una amenaza para el equilibrio político del centroderecha en Argentina. Según destacó, la estrategia del radicalismo debe pasar por mantenerse firmes en sus ideales sin ceder ante propuestas que considera fuera de la lógica institucional, como algunas planteadas por Milei.
Esta línea fue respaldada por Abad, quien también criticó la narrativa de “desgaste de la política tradicional” promovida por el líder libertario y reafirmó el rol protagónico del radicalismo dentro de JxC. En este contexto, se planteó una pregunta crucial: ¿cómo puede la UCR mantener su relevancia en una coalición heterogénea y, al mismo tiempo, responder al crecimiento de fuerzas disruptivas como La Libertad Avanza?
El “outlet” dentro de JxC: ¿un desafío o una oportunidad?
Uno de los puntos más sensibles de la jornada fue la creciente fragmentación dentro de Juntos por el Cambio. Algunos sectores radicales, especialmente los vinculados a jóvenes militantes y referentes locales, han advertido sobre la aparición de dinámicas internas que podrían ser vistas como una especie de “outlet” dentro de la coalición. Esto significaría que JxC podría convertirse en un espacio donde conviven posiciones que no necesariamente comparten una visión de largo plazo coherente.
El concepto del “outlet” también puede ser interpretado desde la perspectiva del electorado: varios votantes que solían apoyar a JxC podrían haber migrado hacia las propuestas de Milei, especialmente por la sensación de desafección con el sistema político actual y las promesas de cambio radical. La pregunta que surge aquí es si la coalición está preparada para responder a estas demandas con propuestas concretas que recuperen la confianza ciudadana.
Sin embargo, algunos dirigentes presentes en el evento señalaron que la fragmentación no debería ser vista únicamente como una debilidad, sino también como una oportunidad. Para ellos, el desafío radica en convertir esta diversidad en una fortaleza, capaz de atraer a distintos sectores electorales sin perder identidad.
El desafío de las elecciones generales
La jornada también estuvo marcada por la mirada al futuro inmediato. Con las elecciones generales a la vuelta de la esquina, la UCR busca consolidar su posición como un actor determinante no solo dentro de Juntos por el Cambio, sino también en el ámbito nacional. El resultado de las PASO, que dejó a Patricia Bullrich como la candidata presidencial de la coalición, obliga al radicalismo a trabajar en conjunto con el resto de las fuerzas de JxC para maximizar las posibilidades de llegar a una segunda vuelta.
Sin embargo, el escenario electoral es altamente competitivo. Con Javier Milei consolidado como uno de los favoritos y Sergio Massa buscando capitalizar su posición como ministro de Economía, el mapa político plantea interrogantes sobre quién podría alcanzar la presidencia. ¿Tiene JxC la capacidad de reinventarse frente a este contexto? ¿Cómo planea la UCR aportar al fortalecimiento del espacio en tiempo récord?
Más allá de las preguntas, quedó claro que el radicalismo no tiene intención de ceder su lugar dentro de una coalición que considera clave para el futuro del país. A través de distintas intervenciones, los líderes radicales presentes insistieron en que su partido tiene propuestas concretas para abordar los principales desafíos del país, como la inflación, la inseguridad y la necesidad de reformas estructurales en áreas como la educación y la salud pública.
La relación de la UCR con Javier Milei y su impacto en la política
Finalmente, el tema de Javier Milei fue recurrente a lo largo de la jornada, tanto en los discursos oficiales como en los debates informales entre militantes y dirigentes. Milei, quien se posicionó como una de las figuras políticas más disruptivas de los últimos años, plantea un desafío no menor para el radicalismo, que históricamente ha defendido valores de institucionalidad y diálogo político.
Mientras que algunos sectores dentro de Juntos por el Cambio han mostrado afinidad con ciertas ideas del economista libertario, la UCR se mantiene firme en la idea de que las propuestas de Milei representan un riesgo importante para el sistema democrático. Tal como lo expresó Morales, el problema no es solamente la falta de experiencia política del candidato de La Libertad Avanza, sino también su discurso “rupturista” que, según él, atenta contra la tradición republicana de la Argentina.
Esta posición refleja una ambivalencia que podría marcar el futuro de las estrategias políticas del radicalismo. Por un lado, deben evitar alienar a los votantes que comparten críticas hacia la política tradicional y que han encontrado en Milei una vía de expresión. Por el otro, deben mantener su compromiso con la moderación como un valor fundamental.
¿Hacia dónde se dirige la UCR bonaerense?
El encuentro en La Plata dejó más preguntas que respuestas sobre el futuro del radicalismo en la Provincia de Buenos Aires y a nivel nacional. Aunque el evento logró consolidar un sentido de unidad interna, los desafíos que enfrenta el partido en el corto plazo son enormes. La relación con JxC, el impacto de Javier Milei en el electorado y la búsqueda de un discurso propio que resuene en un momento de crisis son temas que seguirán ocupando el centro del debate en los meses posteriores a las elecciones generales.
El rol que decidan asumir los dirigentes de la UCR en este contexto será clave para definir qué tipo de radicalismo resurgirá en la Argentina y cuál será su lugar en un tablero político marcado por polarizaciones y transformaciones profundas.