Una intensa ola de calor azota Buenos Aires y 11 provincias argentinas, con temperaturas que superan los 40°C. Las autoridades emiten alertas de salud, recomendando hidratación y evitar el sol. El consumo energético se incrementa, generando cortes de luz y comprometiendo la salud y la economía del país.[Collection]
Alerta por calor extremo en Buenos Aires y 11 provincias
El país enfrenta temperaturas récord tras un diciembre inusual
Luego de un diciembre con registros de temperaturas más frescos de lo habitual, una intensa ola de calor afecta a gran parte del territorio argentino, con Buenos Aires y otras 11 provincias en alerta. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), las temperaturas superan los 40°C en varias localidades, marcando un drástico contraste respecto al inicio del verano.
Las provincias más afectadas hasta el momento incluyen Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja, Mendoza, y San Luis. En Buenos Aires, la ciudad y diversas áreas de su conurbano reportan sensaciones térmicas cercanas a los 42°C. Las autoridades han emitido alertas naranjas y rojas en distintos puntos del país, advirtiendo sobre riesgos graves para la salud, especialmente para niños, personas mayores y quienes padecen enfermedades crónicas.
Recomendaciones del Servicio Meteorológico Nacional
Dado el carácter extremo de las temperaturas, el SMN insta a la población a tomar medidas preventivas. Entre las principales recomendaciones se encuentran la hidratación constante, evitar la exposición directa al sol durante las horas pico –entre las 10:00 y las 16:00 horas–, y usar ropa liviana y de colores claros. El organismo también subraya la importancia de no dejar a personas o mascotas dentro de vehículos cerrados, debido al rápido incremento de la temperatura en espacios confinados.
A través de su plataforma oficial, el SMN también invita a la ciudadanía a mantenerse informada sobre la evolución del clima. “Los próximos días serán críticos en términos de temperatura. Es fundamental tomar precauciones para evitar complicaciones de salud causadas por el impacto del calor extremo”, afirmó Cindy Fernández, vocera del SMN.
Impacto en el sistema energético
El elevado consumo de electricidad producto del uso intensivo de aires acondicionados y ventiladores ya está generando problemas en el suministro energético. En distintos puntos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se han registrado cortes intermitentes de luz, lo que complica aún más la situación para miles de usuarios. Según informó Edenor, estos cortes se deben tanto a la alta demanda como a fallas técnicas en las redes de distribución.
En otros puntos del país, la escena se repite. Provincias como Córdoba y Santa Fe también reportan interrupciones en el servicio, agravando el impacto del calor en los habitantes. Las empresas distribuidoras de energía han solicitado a los usuarios un uso racional de los electrodomésticos para mitigar la presión sobre el sistema.
La salud en riesgo
Los especialistas destacan que este tipo de olas de calor pueden tener consecuencias severas para la salud pública. Desde el Ministerio de Salud recomiendan identificar los síntomas iniciales de un golpe de calor, entre ellos mareos, dolores de cabeza, sudoración excesiva seguida de sequedad corporal, deshidratación y fiebre alta. En casos graves, puede haber pérdidas de conciencia y convulsiones.
Para abordar la situación, varias jurisdicciones están ampliando la disponibilidad de centros de atención primaria y campañas de información pública. “Es imprescindible que las personas sean conscientes de los riesgos del calor extremo y actúen preventivamente. No hay que esperar a que las molestias sean severas antes de consultar a un médico”, advirtió Carla Vizzotti, ministra de Salud.
Consecuencias socioeconómicas
Las altas temperaturas también están impactando en actividades económicas clave para el país. El agro, en particular, enfrenta serias dificultades debido a la combinación del calor extremo y la falta de lluvias, lo que agrava el estrés hídrico en los cultivos. Según datos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), las zonas más afectadas pertenecen al norte y centro del país, donde los rendimientos potenciales de soja y maíz podrían reducirse significativamente.
Por otro lado, las actividades recreativas y turísticas en zonas sin acceso a agua o infraestructura adecuada también están viéndose comprometidas. Algunos municipios costeros y de la zona montañosa registraron una disminución en la afluencia turística, mientras que otros buscan estrategias para mitigar la incomodidad climática de sus visitantes.
Un panorama global
La persistencia de estas olas de calor extrema no solo afecta a Argentina, sino también a otros países de la región como Uruguay, Brasil y Paraguay, donde se han registrado condiciones climáticas similares. Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), las temperaturas globales extremas son cada vez más frecuentes debido al cambio climático, con efectos duraderos en la vida cotidiana y ecosistemas.
En este contexto, expertos enfatizan la necesidad de adoptar medidas estructurales contra el cambio climático. “Las olas de calor prolongadas pueden convertirse en la norma en las próximas décadas si no se toman acciones significativas para combatir el calentamiento global”, advirtió Petteri Taalas, secretario general de la OMM.
Fuente: Página|12