El Servicio Meteorológico Nacional de Argentina ha emitido una alerta roja por calor extremo en Buenos Aires y cinco provincias. Las temperaturas superan los 40°C, afectando especialmente a grupos vulnerables. Se recomiendan medidas de hidratación y cuidado para mitigar riesgos. Además, interrupciones de servicios y eventos han sido reportados.[Collection]
Alertas por calor extremo en Buenos Aires y provincias argentinas
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha elevado la advertencia al nivel rojo en amplias zonas de la Argentina debido a la persistente ola de calor extremo que afecta al territorio. Este nivel implica un efecto alto o extremo sobre la salud de las personas, especialmente en los sectores más vulnerables de la población. En total, cinco provincias están bajo la alerta máxima, mientras que otras regiones permanecen en niveles naranja y amarillo.
Regiones más afectadas y detalles del fenómeno
El nivel rojo de alerta rige para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Gran Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y sectores del Litoral. Estas áreas experimentan temperaturas máximas que superan los 40°C, con sensaciones térmicas superiores debido a la alta humedad. Este fenómeno de calor sostenido no da tregua desde inicios de la semana y coloca en una situación de riesgo especialmente a niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
Por su parte, provincias como Mendoza, San Juan y parte de La Pampa se encuentran bajo alerta naranja, con temperaturas muy elevadas que pueden llegar hasta los 38°C. Otras áreas, aunque menos afectadas, permanecen bajo el nivel amarillo del SMN, indicando que hay posibles impactos en la salud pero en menor escala.
Recomendaciones del Ministerio de Salud
Ante el agobiante calor, el Ministerio de Salud de la Nación emitió una serie de recomendaciones para mitigar los riesgos asociados a las altas temperaturas. Se aconseja mantenerse hidratado bebiendo al menos dos litros de agua por día, evitar la actividad física intensa en horarios de mayor exposición solar (entre las 10 y las 16 horas) y utilizar ropa liviana, de colores claros. También se subrayó la importancia de consumir comidas livianas como frutas y verduras, evitando alimentos pesados o ricos en grasas.
En relación con los más pequeños, se insiste en ofrecer líquidos constantemente, incluso si no lo piden, al tiempo que se recuerda la advertencia de nunca dejar a niños o mascotas dentro de vehículos estacionados. Por el lado de los adultos mayores, se alienta a prestar atención a señales de deshidratación como decaimiento, sequedad en la piel o mareos.
Impactos en servicios y actividades
El calor extremo también provocó efectos colaterales en la prestación de algunos servicios. En el área metropolitana de Buenos Aires, los usuarios reportaron interrupciones en el suministro eléctrico debido al aumento en el consumo energético por el uso masivo de aires acondicionados y ventiladores. Según la empresa distribuidora Edenor, durante las últimas horas se registraron cortes en diversos barrios porteños y del conurbano bonaerense.
Además, las actividades al aire libre, como eventos deportivos y recreativos, fueron pospuestas en varias localidades para evitar exponer a la población a las elevadas temperaturas. Las escuelas en ciertas provincias modificaron horarios o redujeron la carga horaria para cuidar la salud de los estudiantes.
El cambio climático como telón de fondo
Especialistas del Servicio Meteorológico Nacional explicaron que este tipo de olas de calor extremo están vinculadas al cambio climático. “Estos eventos son cada vez más frecuentes e intensos debido al aumento de las temperaturas globales”, señaló Cindy Fernández, meteoróloga del SMN. Según datos recientes, la temperatura media en Argentina ha incrementado en los últimos 30 años, exacerbando los impactos de fenómenos climáticos extremos.
En este contexto, organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierten sobre la necesidad de adoptar medidas inmediatas para mitigar los efectos del calor, entre ellas el diseño de ciudades más resilientes al clima y el fortalecimiento de infraestructuras hidráulicas y eléctricas capaces de responder a las nuevas exigencias.
Mientras tanto, el SMN continuará monitoreando la situación y actualizando las alertas para orientar la planificación de los ciudadanos en las áreas afectadas. Para conocer más detalles sobre el pronóstico en tiempo real, se recomienda visitar los canales oficiales del organismo en internet y redes sociales.
Fuente: Página|12