Las alianzas del PJ disidente y el silencio de Cristina Kirchner generan incertidumbre sobre el futuro político de Kicillof en 2025. Intendentes críticos buscan construir alternativas que podrían fragmentar al peronismo bonaerense, mientras terceras fuerzas como Juntos por el Cambio y libertarios como Milei ven una oportunidad de ganar terreno.[Collection]
Alianzas del PJ disidente amenazan apoyo a Kicillof en 2025
La falta de apoyo explícito de Cristina Kirchner y las estrategias de sectores disidentes
La reconfiguración del panorama político bonaerense comienza a delinear tensiones que podrían complicar el camino del actual gobernador, Axel Kicillof, rumbo a 2025. Los movimientos del PJ disidente, sumados a un notorio silencio por parte de Cristina Fernández de Kirchner, abren interrogantes acerca de la estabilidad de los apoyos que lo llevaron al cargo en 2019 y confirmaron su liderazgo en la reelección de 2023.
Distintos referentes del peronismo disidente en la provincia de Buenos Aires evalúan la posibilidad de construir alianzas que, de consolidarse, podrían erosionar significativamente la base electoral del kirchnerismo. Fuentes cercanas a este espacio señalaron que el objetivo central sería ofrecer una alternativa atractiva de cara a las elecciones provinciales, desafiando el peso histórico del Frente de Todos en el bastión bonaerense.
Referentes clave del PJ disidente y su estrategia
Entre las figuras más relevantes que lideran esta iniciativa se encuentra el intendente Mario Ishii, de José C. Paz, que ha expresado públicamente críticas al manejo centralizado del Frente de Todos. Aunque desde su entorno evitan confirmar intenciones de postularse, analistas políticos no descartan que Ishii pueda desempeñar un papel gravitante en la construcción de un espacio competitivo.
Otra voz disidente es la de Juan Miguel Nosetti, intendente de Salliqueló, quien ya se ha mostrado en desacuerdo con algunas políticas del oficialismo provincial. Nosetti destacó: “El modelo actual no representa a todos los sectores del peronismo, y es momento de demostrar que hay otras formas de gobernar”. Este tipo de declaraciones podría atraer a votantes fatigados por las dinámicas internas del Frente de Todos, cuya cohesión se ha visto debilitada.
El impacto del silencio de Cristina Kirchner
Mientras tanto, el rol de Cristina Kirchner se perfila como una incógnita cada vez más relevante. La vicepresidenta, reconocida como la figura más influyente dentro del espacio oficialista, no ha emitido señales claras de respaldo hacia una eventual nueva postulación de Axel Kicillof. Este silencio resulta significativo, dado que su liderazgo fue crucial tanto en la primera victoria del actual gobernador como en el triunfo electoral de 2023.
Analistas interpretan que la inacción política de la expresidenta podría estar vinculada a tácticas personales de cara a su propio futuro político o a la necesidad de evaluar mejor el escenario interno del Frente de Todos. Sin embargo, algunos aseguran que esta falta de apoyo explícito podría desmotivar a sectores claves del kirchnerismo que esperaban una postura más activa.
Elecciones 2025: un escenario de incertidumbre
Con la provincia de Buenos Aires siendo un terreno clave para el panorama nacional, el clima político se torna más incierto a medida que el PJ disidente aumenta su actividad. La posibilidad de una fragmentación del peronismo bonaerense podría abrir espacio para que terceras fuerzas, como Juntos por el Cambio o el fenómeno libertario liderado por Javier Milei, aprovechen la ocasión y ganen terreno en un bastión históricamente peronista.
Más allá del oficialismo y las disidencias internas, grupos vecinalistas también comienzan a emerger en diferentes municipios, lo que podría complicar aún más la homogeneidad en los votantes peronistas. En este sentido, dirigentes como Gustavo Posse, intendente de San Isidro, han empezado a jugar un papel destacado, buscando posicionarse como una opción moderada frente a las tensiones binaristas del kirchnerismo y el macrismo.
En conclusión, el futuro del gobernador bonaerense Axel Kicillof dependerá en buena parte de las decisiones que tomen los actores más influyentes dentro y fuera del Frente de Todos. Las alianzas en gestación dentro del PJ disidente, junto con la ambigüedad táctica de Cristina Kirchner, configuran un desafío significativo que marcará la agenda política en los próximos dos años.
Fuente de la información: elintransigente.com