Javier Madanes Quintanilla, dueño de Aluar, expresó su preocupación por la proximidad del dólar CCL al tipo de cambio oficial, previniendo que el cepo cambiario continuará por tiempo indefinido debido a la debilidad del Banco Central. Su análisis resalta la necesidad de políticas estructurales para mejorar la economía argentina.[Collection]
Aluar: Dueño advierte sobre cepo y brecha cambiaria prolongada
El empresario Javier Madanes Quintanilla, dueño de Aluar, manifestó su preocupación ante la proximidad del dólar contado con liquidación al tipo de cambio oficial en un contexto económico que sigue generando incertidumbre. Durante declaraciones recientes, también predijo que las restricciones cambiarias continuarán “por mucho tiempo”, lo que ha encendido debates entre economistas y figuras públicas.
Preocupación empresarial por la brecha mínima entre dólares
Desde el sector empresarial, Madanes Quintanilla calificó de alarmante que el dólar contado con liquidación (CCL) esté tan cerca del tipo de cambio oficial, una situación que a su juicio evidencia un mercado sin margen de maniobra. “Es preocupante porque históricamente esta brecha refleja el nivel de presión sobre la economía y, actualmente, ambas cotizaciones están convergiendo”, expresó el empresario. En su análisis, este fenómeno no es sostenible, y sus efectos pueden acentuar la fragilidad económica del país.
El dueño de la emblemática firma Aluar, líder en producción de aluminio, enmarcó sus declaraciones en un contexto global complejo, pero alertó que las políticas internas están lejos de brindar una solución a corto plazo. Según su perspectiva, será difícil eliminar el cepo cambiario debido a la debilidad estructural que caracteriza a las reservas del Banco Central.
El cepo cambiario continuará
Madanes fue categórico en su predicción sobre las restricciones: “El cepo estará por mucho tiempo”. Aunque no precisó cifras exactas, consideró que la medida está atada al déficit de reservas del Banco Central. Según explicó, la falta de divisas suficientes incide directamente en la imposibilidad de liberalizar el mercado cambiario sin desencadenar un impacto inflacionario masivo.
Estas declaraciones coinciden con los desafíos enfrentados por las empresas exportadoras, como Aluar, en un marco donde las restricciones dificultan la libre disposición de divisas provenientes del comercio exterior. “No se trata solo de un tema económico, sino de una decisión estructural que podría extenderse más allá de la coyuntura política actual”, agregó Madanes.
Reacciones de Luis Caputo y José Luis Espert
Las advertencias del empresario no pasaron desapercibidas. Tanto el economista Luis Caputo como el diputado José Luis Espert expresaron su opinión a través de la red social X. Caputo, exministro de Finanzas, cuestionó enérgicamente la falta de un plan económico que permita recuperar la confianza en el mercado de cambios. Por su parte, Espert calificó de “preocupante” que el empresariado haya adoptado un enfoque pesimista, considerando que este tipo de declaraciones pueden influir negativamente en la percepción de los inversores.
Ambos coincidieron en que la continuidad del cepo cambiario es un síntoma de una política económica sin proyección clara. “Mientras sigamos sin un rumbo claro, serán los mismos empresarios quienes evidenciemos los efectos de estas decisiones erráticas”, afirmó Espert desde su cuenta oficial.
El impacto en las políticas del Banco Central
En el epicentro de estas declaraciones se encuentra el rol del Banco Central, que enfrenta crecientes desafíos para mantener el equilibrio entre el dólar oficial y las cotizaciones paralelas. Con reservas netas negativas, la entidad se ve obligada a sostener las restricciones para evitar un desbordamiento del tipo de cambio.
Madanes Quintanilla destacó que estas tensiones se trasladan inevitablemente al sector privado. “Las empresas enfrentamos dificultades operativas que limitan la capacidad de proyectar inversiones y crecimiento. Es una situación insostenible en el mediano plazo”, subrayó. Las declaraciones también sugieren que, sin reformas estructurales profundas, el país podría quedar atrapado en un círculo vicioso de pérdida de competitividad y baja credibilidad económica.
Más allá de la coyuntura política
Si bien el análisis del dueño de Aluar advierte sobre la inercia económica actual, también hace un llamado a pensar en soluciones de fondo más allá del cambio de administración en el Gobierno nacional. “Lo que necesitamos como país son políticas a largo plazo que permitan no solo estabilizar la economía, sino también fomentar la producción y el comercio”, indicó.
El impacto del cepo cambiario y la incertidumbre sobre la estabilidad del tipo de cambio han sido objeto de un debate que parece no tener fin. Según Madanes, Argentina debe articular medidas que vayan más allá de la contingencia, enfocándose en mejorar la estructura productiva y generar previsibilidad para atraer inversiones.
La incógnita de mediano plazo
Las declaraciones de Javier Madanes Quintanilla no hacen más que sumar cuestionamientos a un sistema que, en opinión de muchos expertos, está agotado. A medida que las elecciones presidenciales se aproximan, se intensifica el debate sobre cuál debería ser el modelo económico para superar las restricciones actuales.
En este contexto, las voces del ámbito empresarial como la de Madanes reflejan las preocupaciones de un sector clave en la economía argentina, que sigue siendo fuertemente dependiente de las decisiones macroeconómicas y de la capacidad del país para generar estabilidad con proyección internacional.
Fuente: Ezequiel Burgoy – Clarín