Florianópolis enfrenta una crisis sanitaria por un aumento de diarrea viral, afectando a turistas y residentes. Las autoridades investigan un posible norovirus, vinculado a la contaminación del agua. Se implementan medidas para contener la propagación, pero los expertos advierten sobre la necesidad de mejorar la infraestructura sanitaria. Las reservas turísticas ya se ven afectadas.[Collection]
Aumento de diarrea viral provoca alerta sanitaria en Florianópolis
Florianópolis, uno de los destinos turísticos más populares de Brasil y tradicionalmente preferido por miles de argentinos, vuelve a enfrentar una crisis sanitaria provocada por el alarmante aumento de casos de enfermedades gastrointestinales. La recurrente situación ha puesto en alerta tanto a las autoridades locales como a los especialistas en salud pública.
El origen del brote y las preocupaciones sanitarias
En lo que va del verano, numerosos turistas y residentes han reportado síntomas típicos de diarrea viral, como vómitos, fiebre y dolores abdominales severos. Si bien los informes oficiales todavía no han determinado el agente patógeno exacto, todo apunta a que se trata de un norovirus, altamente contagioso y con gran capacidad de propagación en áreas densamente visitadas como las playas y zonas urbanas de Florianópolis.
La contaminación de las aguas y alimentos consumidos en la región figura como principal hipótesis de los especialistas. “El deterioro de la calidad del agua y las infraestructuras sanitarias no preparadas para soportar la masiva afluencia de turistas son factores determinantes en este tipo de brotes”, indicó el infectólogo brasileño Luiz Carlos Ramos, quien instó a las autoridades a tomar acciones inmediatas para mitigar el impacto de la crisis.
Florianópolis, un destino en el centro de la escena
La isla de Santa Catarina, conocida popularmente como Florianópolis, ha sido durante años uno de los lugares predilectos de vacaciones para turistas argentinos. Este 2023 no ha sido la excepción, con una notable afluencia de visitantes en los primeros meses del año. Sin embargo, las recurrentes quejas relacionadas con problemas de salud han generado un clima de incertidumbre entre los turistas y una posible baja en las futuras reservas.
Cabe destacar que este problema no es nuevo. En temporadas anteriores, Florianópolis también registró episodios de brotes gastrointestinales, lo cual llevó a voces críticas a señalar la falta de avances en infraestructura sanitaria en zonas turísticas como Canasvieiras, Ingleses y Jurerê Internacional.
Medidas implementadas por las autoridades
El gobierno local ha anunciado una serie de medidas para contener la propagación de la enfermedad, entre las que se incluyen el refuerzo de la vigilancia sanitaria en comercios de alimentos y el monitoreo de calidad de las aguas. Además, se han distribuido materiales informativos en varios idiomas para educar tanto a residentes como a turistas en las prácticas de higiene necesarias para prevenir la infección.
A pesar de los esfuerzos, los especialistas piden controles más estrictos. Según datos aportados por el Departamento de Salud de Santa Catarina, más del 30 % de las áreas monitoreadas presentan niveles preocupantes de contaminación bacteriana, lo que podría agravar aún más la situación si no se toman medidas preventivas a largo plazo.
Recomendaciones para los turistas
En este contexto, se recomienda a los turistas extremar las precauciones para evitar posibles contagios. Entre las principales recomendaciones figuran el consumo exclusivo de agua potable o embotellada, evitar alimentos de dudosa procedencia y lavar cuidadosamente las frutas y verduras antes de consumirlas. Además, es fundamental mantener una buena higiene de manos, utilizando jabón o desinfectante a base de alcohol.
Las agencias de viaje también han comenzado a advertir sobre estos riesgos a quienes están planificando visitar Florianópolis en los próximos meses, generando un ligero descenso en las reservas hacia esta región en comparación con otros años.
El rol de los expertos en la evaluación del brote
Varios especialistas han señalado que es imperativo mejorar la infraestructura básica de la ciudad, especialmente en lo que refiere a la provisión de agua potable y el tratamiento de aguas servidas. “El problema está relacionado con el manejo deficiente de las aguas residuales en la región. Las lluvias recientes también pueden haber contribuido a la propagación de patógenos en las playas”, opinó el ambientalista Bruno Machado durante una entrevista con medios locales.
Por su parte, Paula Aguilar, epidemióloga argentina, destacó que este tipo de brotes suelen intensificarse durante la temporada turística debido a la gran concentración de personas y al aumento en la presión sobre los servicios locales. “Lo que estamos viendo en Florianópolis podría volverse un fenómeno recurrente si no se implementan reformas estructurales”, agregó.
Pérdidas económicas y reputación en juego
El impacto del brote no es únicamente sanitario, sino también económico. Florianópolis, con una economía altamente dependiente del turismo, podría enfrentar significativas pérdidas si la percepción de un destino inseguro se instala en los mercados emisores, especialmente el argentino, que representa una porción considerable de los visitantes extranjeros.
El sector hotelero y gastronómico ha expresado preocupación por la situación, solicitando al gobierno tomar medidas rápidas y efectivas para restaurar la confianza de los turistas. Asimismo, los empresarios locales temen que los informes mediáticos sobre los casos de diarrea viral desincentiven no solo a los visitantes internacionales, sino también a los brasileños que consideran viajar a Santa Catarina.
Conclusiones de los especialistas
Frente a este panorama, los especialistas coinciden en que el problema no tendrá una solución sostenible sin inversiones concretas en la mejora de la infraestructura sanitaria de Florianópolis. En tanto, instan a las autoridades a dar respuesta inmediata a las alertas epidemiológicas y garantizar que las playas y servicios turísticos cumplan con los controles necesarios para proteger la salud pública.
Fuente: Ámbito