El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, critica al gobernador Axel Kicillof por la inseguridad en la frontera entre CABA y la Provincia de Buenos Aires, tras ataques a policías. Macri pide mayor coordinación y solución al problema, mientras Kicillof promete evaluar estrategias, pero la falta de diálogo agrava la situación.[Collection]
Conflicto entre CABA y Provincia de Buenos Aires por inseguridad
El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, arremetió contra el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, luego de que se registraran recientes ataques a efectivos de la Policía de la Ciudad en territorio bonaerense. Los incidentes generaron una fuerte tensión entre ambas jurisdicciones y reavivaron el debate sobre la falta de coordinación en materia de seguridad en zonas limítrofes.
El reclamo de Jorge Macri
Jorge Macri exigió soluciones inmediatas a lo que calificó como “un problema de desprotección en la Provincia”. Según el mandatario porteño, episodios reiterados de violencia han puesto en peligro la vida de policías de la Ciudad de Buenos Aires que, según él, quedan expuestos cuando ingresan a territorio bonaerense. “No podemos permitir que esta situación continúe. Es una obligación del gobierno provincial garantizar la seguridad en su territorio”, afirmó en declaraciones a la prensa.
El jefe de Gobierno porteño hizo hincapié en la necesidad de un mayor compromiso por parte de Kicillof y de la administración provincial. “Es inaceptable que nuestras fuerzas sean atacadas cuando están cumpliendo su deber. Esto refleja un vacío de seguridad que no puede ser tolerado”, sostuvo Macri, quien también pidió un refuerzo inmediato de las medidas de seguridad en las zonas limítrofes entre ambas jurisdicciones.
El enfoque del Gobierno bonaerense
Desde la Provincia de Buenos Aires, el equipo de Axel Kicillof evitó responder directamente a las acusaciones de Jorge Macri. Sin embargo, fuentes cercanas al gobernador afirmaron que se están evaluando nuevas estrategias para garantizar la seguridad en áreas críticas. También remarcaron que consideran fundamental avanzar hacia una colaboración más estrecha con la Ciudad de Buenos Aires para abordar los desafíos conjuntos en materia de inseguridad.
No es la primera vez que la seguridad se convierte en un tema de disputa entre ambos gobiernos. Históricamente, las áreas limítrofes que conectan la Capital Federal con el Conurbano Bonaerense han sido escenario de tensiones políticas y operativas, lo que complica la aplicación de políticas efectivas e integradas en estos sectores.
Los ataques que desataron el conflicto
El conflicto se desató tras una serie de episodios recientes en los que efectivos de la Policía de la Ciudad fueron agredidos en territorio bonaerense mientras perseguían a delincuentes que cruzaban los límites urbanos. Según informes preliminares, los atacantes utilizaban zonas del Conurbano como refugio, aprovechando la falta de coordinación interjurisdiccional entre las fuerzas de seguridad de ambas jurisdicciones.
Estos hechos han incrementado las críticas hacia la administración provincial y reactivado las demandas de mayor seguridad y cooperación por parte de los representantes porteños. En este contexto, la falta de una respuesta contundente desde el Ejecutivo de Kicillof ha aumentado las inquietudes en la Ciudad de Buenos Aires respecto a un posible incremento de la violencia en las áreas limítrofes.
Un conflicto de larga data
La disputa por la inseguridad en las fronteras entre CABA y la Provincia no es nueva. A lo largo de los años, distintos analistas han señalado las dificultades que enfrentan ambas administraciones para trabajar de manera conjunta en la prevención del delito. Según expertos, la multiplicidad de jurisdicciones, sumada a las tensiones políticas, ha sido un obstáculo constante para la creación de políticas coordinadas.
Por su parte, organizaciones de derechos humanos y asociaciones vinculadas a la seguridad ciudadana han solicitado reiteradamente la implementación de un comando unificado que permita una respuesta más efectiva a los problemas de inseguridad fronteriza. Sin embargo, hasta la fecha, las propuestas no han tenido un impacto significativo en la gestión de los conflictos.
Impacto político
El enfrentamiento entre Jorge Macri y Axel Kicillof llega en un contexto políticamente sensible, ya que ambos líderes representan a coaliciones políticas opuestas. Mientras que Macri es una de las principales figuras de Juntos por el Cambio, Kicillof es un referente del Frente de Todos. Este cruce de declaraciones ha llevado a muchos analistas a interpretar el conflicto no solo como un reclamo por seguridad, sino también como un símbolo de las tensiones políticas que atraviesan al país.
En este marco, los incidentes recientes han generado un amplio debate público y mediático sobre la necesidad de priorizar la seguridad por encima de las diferencias partidarias. Mientras tanto, los vecinos de ambas jurisdicciones continúan exigiendo medidas concretas para enfrentar una problemática que afecta su vida cotidiana.
Por el momento, la solución a este enfrentamiento parece estar lejos de alcanzarse, y la falta de diálogo entre los líderes de ambas jurisdicciones no hace más que profundizar las divisiones y la incertidumbre en torno a la seguridad en las zonas de frontera.
Fuente: 0221