El papa Francisco se recupera en el Policlínico Gemelli de Roma tras su segunda noche internado. A sus 87 años, su estado es considerado estable, aunque la preocupación persiste debido a sus antecedentes médicos. La hospitalización podría impactar su agenda, reavivando especulaciones sobre su futuro liderazgo en la Iglesia.
Estado de salud del papa Francisco tras su internación
El papa Francisco atraviesa una nueva etapa en su recuperación tras haber pasado su segunda noche internado en el Policlínico Gemelli de Roma. El Sumo Pontífice, de 87 años, fue ingresado el domingo debido a controles médicos programados en el marco de su salud, lo que despertó inquietudes dentro y fuera del Vaticano. Según el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, Francisco continúa bajo supervisión médica y su evolución es considerada estable.
Desde el Vaticano informaron que su estado no reviste gravedad, aunque sigue en observación para evaluar su recuperación antes de autorizar su alta médica. En este sentido, la preocupación se debe a sus antecedentes médicos, que en los últimos años han requerido hospitalización en diversas ocasiones. Su equipo médico ha señalado que su estado de ánimo es bueno y que se encuentra en contacto con sus colaboradores más cercanos, lo que da señales positivas sobre su situación.
Preocupación y antecedentes médicos
El papa Francisco ha enfrentado diversos problemas de salud en los últimos años. En 2021, fue sometido a una cirugía de colon en el mismo hospital de Roma, una intervención que lo mantuvo hospitalizado por varios días. En marzo de 2023, fue internado por una infección respiratoria que generó preocupación en la comunidad católica y global. Además, su movilidad se ha visto reducida en los últimos meses, lo que ha generado especulaciones sobre su capacidad para continuar cumpliendo con sus deberes papales sin dificultades.
A pesar de estos antecedentes, fuentes del Vaticano aseguran que en esta ocasión la internación no está vinculada a ningún cuadro grave. Sin embargo, el hermetismo en la información brindada por la Santa Sede impide conocer con precisión el motivo exacto de la hospitalización y su tratamiento. Esta falta de detalles ha dejado abiertas diversas especulaciones sobre la verdadera condición de salud del Pontífice.
Impacto en su agenda y el futuro papal
La hospitalización del papa ha generado interrogantes sobre sus próximos compromisos. Francisco había mantenido un ritmo de actividad constante incluso en medio de sus problemas de salud. Sin embargo, la incertidumbre sobre su estado físico podría afectar su agenda en el corto plazo. El Sumo Pontífice tiene programadas varias audiencias y eventos en los próximos meses, incluyendo reuniones de relevancia dentro de la Iglesia Católica.
Este contexto también reaviva el debate sobre la posibilidad de que Francisco pueda tomar una decisión similar a la de su antecesor, Benedicto XVI, y evaluar una renuncia en caso de que su estado de salud lo impida continuar con sus funciones. Hasta ahora, el papa ha rechazado la posibilidad de dimitir y ha asegurado que continuará con su labor mientras se lo permita su condición física. Sin embargo, las hospitalizaciones recurrentes alimentan especulaciones sobre el futuro del liderazgo de la Iglesia Católica.