Estudiantes venezolanos de diversas universidades rechazaron la investidura de Nicolás Maduro, considerándola ilegítima. Acusan al mandatario de perpetuar un sistema antidemocrático y organizan protestas exigiendo elecciones libres. La comunidad internacional también desconoce su legitimidad, mientras el movimiento estudiantil llama a la unidad en defensa de la democracia.[Collection]
Estudiantes venezolanos rechazan investidura de Maduro como ilegítima
Protestas en medio de denuncias de ilegitimidad
En un fuerte pronunciamiento, asociaciones estudiantiles de diversas universidades de Venezuela calificaron de “ilegítima” la reciente investidura de Nicolás Maduro para un nuevo período presidencial. La comunidad universitaria asegura que este proceso carece de transparencia y autenticidad democrática, reflejando el rechazo de amplios sectores tanto dentro como fuera del país.
La Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU-UCV) lideró el llamado, acusando al mandatario de perpetuar un sistema que contradice los principios democráticos. “Esta posesión no es más que una burla al pueblo venezolano y a la Constitución. Es completamente ilegítima”, declaró Jesús Mendoza, presidente de la FCU-UCV, en una concurrida rueda de prensa realizada el jueves pasado en Caracas.
Contexto internacional y local
La asunción de Maduro, ocurrida el pasado 10 de enero, ha estado marcada por fuertes críticas tanto a nivel nacional como internacional. Diversos gobiernos, incluidos Estados Unidos, Canadá y varios países de la Unión Europea y América Latina, se han negado a reconocer la legitimidad del líder chavista. Alegan que las elecciones de mayo de 2018, de las cuales resultó reelecto, estuvieron plagadas de irregularidades como la manipulación del sistema electoral y la exclusión de candidatos opositores clave.
A nivel interno, el rechazo no solo proviene del ámbito estudiantil. Diversas organizaciones civiles y partidos de oposición han levantado su voz en contra de lo que califican como “una dictadura consolidada”. La Asamblea Nacional, de mayoría opositora, expresó que Maduro usurpa funciones tras haber juramentado su cargo ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no ante el Parlamento, como establece la Constitución venezolana.
Movilizaciones estudiantiles
El sector estudiantil ha sido históricamente uno de los mayores impulsores de la protesta social en Venezuela, y esta ocasión no fue la excepción. Desde el lunes, estudiantes de universidades como la UCV, la Universidad de los Andes (ULA) y la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) organizaron concentraciones y asambleas para discutir acciones frente a lo que consideran un gobierno ilegítimo. Estas reuniones han dado lugar a manifestaciones que tuvieron lugar en varias ciudades del país durante el fin de semana, con pancartas que exigían “respeto a la democracia” y “elecciones libres”.
“Es nuestro deber como jóvenes y como estudiantes defender los derechos ciudadanos y el futuro del país. No podemos permitir que la arbitrariedad se convierta en una norma”, afirmó Mariana Brito, vocera del movimiento estudiantil de la UCAB.
Las protestas, aunque mayoritariamente pacíficas, estuvieron acompañadas por un fuerte despliegue de fuerzas de seguridad en Caracas y otras regiones. Varias organizaciones denunciaron episodios de represión y detenciones de manifestantes, lo que ha generado inquietud entre instituciones de derechos humanos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
El rol de la comunidad internacional
La presión de la comunidad internacional no se ha hecho esperar. El Grupo de Lima, que aglutina a 14 países de América Latina y el Caribe, emitió un comunicado en el que afirma que no reconocen a Maduro como presidente legítimo. Igualmente, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, reiteró su apoyo a la Asamblea Nacional como único órgano legítimo del poder en Venezuela y urgió a nuevas elecciones bajo supervisión internacional.
No obstante, el gobierno de Maduro ha desestimado estas acciones, calificándolas como “intervencionismo extranjero”. En un discurso tras su toma de posesión, Maduro aseguró que “los pueblos libres no se arrodillan ante potencias imperiales ni ante sus conspiraciones mediáticas”.
Un llamado a la unidad
Entre los estudiantes prevalece un sentimiento de unidad y resistencia. A pesar de las divisiones políticas que atraviesan al país, el movimiento juvenil ha mostrado cohesión en sus demandas, llamando a todos los sectores sociales a movilizarse de forma conjunta. “Hoy más que nunca necesitamos que todos en Venezuela estén de pie y unidos por el mismo objetivo: recuperar la democracia”, declaró Jesús Mendoza.
Por ahora, el panorama en Venezuela sigue siendo incierto. Mientras el gobierno de Maduro busca consolidarse pese a los cuestionamientos, voces como la de los estudiantes universitarios continúan elevándose como parte de la lucha por cambios en el país.
Fuente: Newsroom Infobae