Israel presiona a Hamas para que libere rehenes durante la tregua mediada por Catar, Egipto y EE. UU. El acuerdo busca un cese de hostilidades de cuatro días a cambio de la liberación de prisioneros palestinos. La incertidumbre persiste sobre el cumplimiento, mientras la comunidad internacional observa atentamente.
Presión sobre Hamas para liberar rehenes
El gobierno de Israel advirtió que espera que Hamas libere a los rehenes israelíes durante este sábado como parte del acuerdo de tregua mediado por Catar, Egipto y Estados Unidos. Según el asesor de Seguridad Nacional israelí, Tzachi Hanegbi, hasta el momento no han recibido la lista oficial con los nombres de los secuestrados que serán devueltos, lo que genera incertidumbre sobre el cumplimiento de la tregua pactada.
El acuerdo establece un cese de hostilidades de cuatro días en la Franja de Gaza a cambio de la liberación gradual de al menos 50 rehenes retenidos por Hamas desde los ataques del 7 de octubre. A cambio, Israel deberá liberar a unos 150 prisioneros palestinos, principalmente mujeres y menores de edad, algo que ha sido centro de debate dentro del gobierno de Benjamin Netanyahu.
En las últimas horas, Hanegbi dejó en claro que Israel espera que la entrega de rehenes se realice este sábado sin retrasos. En caso contrario, sugirió que las operaciones militares contra Hamas podrían reanudarse. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) mantienen su presencia en la Franja de Gaza y han señalado que están preparadas para cualquier eventualidad.
Condiciones y tensiones en la negociación
El acuerdo negociado exige que Hamas libere a rehenes en grupos escalonados a lo largo de cuatro días, priorizando a mujeres y niños. A cada liberación, Israel corresponderá con la excarcelación de palestinos detenidos en sus prisiones. Sin embargo, no se han dado detalles sobre el estado de salud de los secuestrados y si estos incluyen a ciudadanos extranjeros.
Mientras tanto, el primer ministro Benjamin Netanyahu reiteró que, una vez finalizado el cese al fuego, las operaciones contra Hamas se intensificarán. Afirmó que la destrucción de la estructura militar y política del grupo es un objetivo innegociable de su gobierno. Esta postura ha generado dudas sobre si la tregua podría extenderse y si hay posibilidades de nuevas negociaciones tras la liberación.
Por su parte, Hamas ha insistido en que el cumplimiento del acuerdo depende de que Israel también respete su compromiso de frenar los bombardeos en Gaza y permitir la entrada de ayuda humanitaria. Organizaciones internacionales han advertido sobre la crisis extrema en la región y el creciente número de víctimas civiles, lo que añade presión a ambas partes para prolongar el alto el fuego más allá de los cuatro días pactados.
Aunque el intercambio de prisioneros y la tregua representan el primer avance diplomático en semanas de conflicto, el futuro sigue siendo incierto. Israel mantiene su postura de continuar los ataques una vez finalizado el acuerdo, mientras Hamas ha advertido que no liberará más rehenes si la ofensiva militar se reanuda.
Las próximas horas serán clave para definir el desenlace de esta crisis y si el acuerdo logra abrir una vía para una distensión mayor en el conflicto. La comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos, esperando que ambas partes respeten sus compromisos.