A partir del 1° de enero de 2025, se eximirá del Impuesto de Sellos a quienes compren una vivienda única en CABA, siempre que no supere los $205.332.000. La medida busca facilitar el acceso a la vivienda y reducir los costos para compradores, incentivando el mercado inmobiliario en un contexto económico desafiante.[Collection]
Impuesto de Sellos: Ahorros en la compra de propiedad en CABA
A partir del 1° de enero de 2025, las personas que adquieran una vivienda única, familiar y de ocupación permanente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires quedarán exentas del pago del Impuesto de Sellos, siempre y cuando el valor de la propiedad no supere los $205.332.000, equivalentes a aproximadamente US$200.000. Esta normativa busca fomentar el acceso a la vivienda en un contexto económico desafiante.
Un alivio para compradores
El beneficio se aplicará exclusivamente a quienes compren propiedades destinadas a uso personal, como viviendas únicas y permanentes. Este cambio implica un importante ahorro que puede resultar clave en el proceso de adquisición de una vivienda. Actualmente, el Impuesto de Sellos representa un cargo adicional del 3,6% sobre el valor total de la propiedad, lo cual puede traducirse en un monto significativo que afecta el presupuesto de los compradores.
Por ejemplo, hasta 2024, quienes adquirían un inmueble de US$200.000 (aproximadamente $205 millones al tipo de cambio actual) debían abonar cerca de $7.392.000 solo en concepto del Impuesto de Sellos. Con el nuevo reglamento, ese dinero ya no será un condicionante para aquellos que entren en el segmento exento, generando así un incentivo para el acceso a la vivienda.
Detalles del alcance de la normativa
El gobierno porteño puntualizó que esta medida estará destinada a beneficiar únicamente a quienes adquieran una primera vivienda y no posean inmuebles previos a su nombre. Además, es condición fundamental que las propiedades incluidas en el beneficio estén registradas como vivienda principal, lo que excluye usos como oficinas, locales comerciales o actividades de renta.
Los desarrolladores inmobiliarios y operadores del mercado celebraron el aumento del tope exento, señalando que reflejará una mayor actividad en el sector. “Esto puede ser un estímulo que permita recuperar un mercado que se ha visto golpeado en los últimos años”, comentó un representante del sector inmobiliario. Sin embargo, advirtieron que el límite de US$200.000 podría quedar desfasado rápidamente frente a la inflación y el incremento del valor del metro cuadrado en varias áreas de la ciudad.
Impacto en el mercado inmobiliario
De acuerdo con cifras oficiales y análisis del comportamiento del mercado, al menos un 30% de las propiedades en venta en la Ciudad de Buenos Aires se encuentran por debajo del umbral de US$200.000. Esto significa que una proporción relevante tanto de compradores como de vendedores se beneficiará de la normativa en el corto plazo. No obstante, señalan expertos, esta proporción podría cambiar si no se actualiza el techo exento de acuerdo con la realidad inflacionaria.
El alivio impositivo también busca reactivar sectores del mercado que manejan propiedades de menor superficie, particularmente en barrios populares de la ciudad. Zonas como Villa Lugano, Villa Soldati y Mataderos, donde los valores de las propiedades suelen ajustarse al nuevo límite establecido, podrían recibir más interés en la compra de viviendas bajo esta normativa.
Condiciones y procedimientos
Para poder acceder a esta exención, los compradores deberán cumplir con determinados requisitos. Entre ellos, estar registrados como contribuyentes dentro del territorio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y declarar formalmente que la vivienda adquirida será destinada a uso familiar y permanente. Además, deberán presentar documentación que acredite no ser propietarios de otro inmueble y no haber solicitado esta excepción previamente.
Por otro lado, los escribanos, quienes actúan como intermediarios en estas transacciones, tendrán la responsabilidad de certificar que todos los documentos cumplan con las condiciones exigidas bajo el nuevo régimen. De esta manera, se garantiza la correcta implementación de la medida sin evasiones fiscales.
Una política en línea con el contexto actual
La implementación del aumento del monto exento busca aliviar parcialmente los costos de adquisición de propiedades en un momento en que el acceso al crédito hipotecario es limitado y los precios del mercado inmobiliario muestran fluctuaciones constantes. La medida también busca equilibrar los desequilibrios entre los precios de mercado y los ingresos promedio de la población, que han sido golpeados por la inflación.
Aunque reconocen como positiva la iniciativa, algunos especialistas han señalado la necesidad de formular políticas complementarias para mejorar el acceso a la vivienda. Entre las recomendaciones frecuentes se encuentran la restauración de los créditos hipotecarios UVA con ajustes adecuados a los salarios, la reducción en los costos de construcción y la eliminación de restricciones cambiarias que afectan las operaciones en dólares.
Perspectivas a futuro
De cara a 2025, el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se perfila como uno de los pioneros en implementar este tipo de ajustes en beneficio de los nuevos propietarios. Con este esquema, esperan promover el acceso a la vivienda sin impactar directamente en los ingresos fiscales provenientes de inmuebles de mayor valor ni de operaciones realizadas con fines comerciales.
Sin embargo, será clave monitorear y actualizar periódicamente el monto exento para mantener el espíritu original de la medida. Esto será particularmente importante en un contexto inflacionario como el que atraviesa Argentina, donde los valores de las propiedades y los costos asociados pueden variar drásticamente en cortos períodos de tiempo.
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