El gobierno argentino endureció sanciones de tránsito para reducir accidentes, con multas que superan $1.500.000. Las infracciones graves incluyen conducir ebrio, exceso de velocidad y pasar semáforos en rojo, resultando en multas y suspensión de licencias. Las medidas buscan una conducción más responsable, combinando penalizaciones económicas con educación vial.[Collection]
Infracciones que te harán perder la licencia de conducir
En un nuevo intento por regular el tránsito y reducir siniestros viales, el gobierno argentino ha dispuesto un aumento significativo en las sanciones para las infracciones de tránsito más graves. Según la normativa actualizada, las multas máximas ahora pueden superar $1.500.000, una cifra que busca concientizar a los conductores y aumentar el respeto por las reglas de tránsito. Esta actualización, además, endurece las penalizaciones que podrían derivar en la retención inmediata de la licencia de conducir.
Incremento de multas y la prevención de accidentes
Las nuevas disposiciones forman parte de un plan integral que apunta a reforzar la seguridad vial en todo el territorio argentino. El aumento en el costo de las sanciones incluye a un amplio número de infracciones que, según las autoridades, representan las principales causas de accidentes en calles y rutas. Entre las infracciones más severas que podrían implicar tanto la pérdida de puntos en el sistema de scoring como la retención de la licencia figuran conducir en estado de ebriedad, exceso de velocidad y pasos en rojo.
El costo de las multas se calcula en Unidades Fijas (UF), cuyo valor está vinculado al precio de un litro de combustible. Con este aumento, las infracciones graves como conducir bajo los efectos del alcohol o drogas se multarán con hasta 3.000 UF, equivalentes a más de $1.500.000.
Infracciones gravísimas
La ley establece que ciertas conductas representan un riesgo extremo para la seguridad vial y, por tanto, tienen sanciones ejemplares. Según las nuevas disposiciones, los conductores que acumulen infracciones consideradas gravísimas podrían no solo enfrentar multas monetarias significativas sino también la suspensión inmediata de su licencia.
Entre estas infracciones se destacan:
- Conducir bajo efectos del alcohol o drogas: Además de multas económicas, esta práctica es causal de inhabilitación para conducir por períodos determinados dependiendo del grado de alcoholemia detectado.
- Exceso de velocidad: Superar los límites establecidos pone en riesgo tanto al conductor como a los demás usuarios de la vía pública.
- Pasar semáforos en rojo: Una conducta que impacta directamente en la seguridad vial y es sancionada severamente con multas y posibles suspensiones.
- Circular sin seguro obligatorio: La ausencia de esta cobertura mínima también es considerada una infracción grave.
La relación entre multas y educación vial
El endurecimiento de las penas busca incidir directamente en el comportamiento de los conductores. Según fuentes oficiales, el enfoque no solo es punitivo sino también educativo. La medida se complementa con campañas de concientización y programas de capacitación obligatorios para quienes pierdan puntos en su licencia como parte del sistema de scoring implementado en los últimos años.
Ricardo Lippi, especialista en derecho vial, explicó que “aumentar el costo económico de las infracciones tiene un doble objetivo: fomentar una conducción más responsable y mejorar la seguridad de todos los ciudadanos”. Así, el impacto de esta normativa no es solo disuasorio sino también preventivo.
Cuáles son los próximos pasos para conductores reincidentes
Quienes acumulen reincidencias en infracciones gravísimas se verán expuestos a suspensiones más largas o, en casos extremos, la pérdida definitiva de su licencia de conducir. Un informe del Ministerio de Transporte destacó que el sistema de reincidencias se empezó a aplicar con mayor rigurosidad este año, con énfasis en la peligrosidad de las conductas reiteradas.
Además, para recuperar puntos o licencias retenidas, los infractores deberán realizar cursos de reeducación vial y aprobar exámenes que certifiquen que están aptos para volver a conducir. Todo esto está enmarcado en un plan de modernización que pretende incluir mayor tecnología en el monitoreo de infracciones a fin de garantizar la transparencia y eficacia de los controles.
Sanciones ejemplares contra el alcohol al volante
Una de las infracciones que mayor énfasis ha recibido en esta actualización legal es la conducción bajo los efectos del alcohol. Según datos oficiales, en 2022, más del 10% de los accidentes viales con lesionados o fallecidos tuvieron como factor contribuyente el consumo de alcohol. Por esa razón, las multas por alcoholemia positiva se han incrementado significativamente y pueden alcanzar sumas record de $1.500.000 en casos graves.
Además, la tolerancia al alcohol en sangre para conductores profesionales ahora es de 0.0 g/L en todo el país, mientras que los particulares pueden ser sancionados a partir de los 0.5 g/L. En provincias como Córdoba y Salta, se han implementado controles más estrictos para garantizar el cumplimiento de estas normativas.
En palabras de Gonzalo Semilla, vocero del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, “el objetivo va más allá del aumento de las sanciones económicas y busca implementar una conciencia colectiva sobre los peligros del alcohol al volante”.
La medida también incluye protocolos más estrictos para quienes se nieguen a someterse al control de alcoholemia, equiparando esta conducta a una infracción gravísima con sanciones severas.
Para más información, consulta la fuente original en El Cronista.