Javier Milei celebró Janucá con su Gabinete en Olivos, destacando la importancia de la luz y la esperanza. La ceremonia incluyó el encendido de la menorá y un discurso donde Milei conectó la festividad con valores de libertad y resistencia. El evento, inusual en política argentina, generó reacciones diversas.[Collection]
Javier Milei celebra Janucá con su Gabinete en Olivos
El presidente Javier Milei encabezó este martes una reunión con su Gabinete en la residencia de Olivos, donde se llevó a cabo una celebración con motivo de Janucá, la festividad judía conocida como la Fiesta de las Luminarias. El evento, realizado en un ambiente distendido, reunió a las principales figuras de su equipo ministerial, marcando un momento inusual en el ámbito político argentino.
Un símbolo de luz y esperanza
Durante el encuentro, que tuvo lugar en la noche, Milei participó en la tradicional ceremonia de encendido de la menorá, el candelabro de nueve brazos característico de esta festividad judía. “Janucá es una celebración que nos recuerda la importancia de la luz, la esperanza y la perseverancia frente a la adversidad”, expresó el mandatario en un breve discurso dirigido a sus ministros y colaboradores presentes.
El acto, que combinó espiritualidad y política, fue organizado en un marco íntimo y contó con la presencia de ministros como el jefe de Gabinete, Alberto Benegas Lynch (h), y el ministro de Economía, Emilio Ocampo. Asimismo, participaron diversas figuras clave del círculo cercano al presidente, quienes se sumaron a esta festividad que busca conmemorar la recuperación del Templo Sagrado de Jerusalén y el milagro del aceite.
Un evento sin precedentes en la política argentina
El gesto no pasó desapercibido en el ámbito nacional. Aunque Argentina cuenta con una nutrida comunidad judía, no es común que actos religiosos vinculados al judaísmo formen parte de la agenda presidencial. Para Milei, conocido por sus ideas disruptivas y su fuerte posicionamiento político y económico, el acto también reflejó una faceta personal y espiritual que pocos conocían.
“Hay una conexión significativa en transmitir valores de libertad individual y espiritualidad dentro del marco de esta celebración. Janucá marca la importancia de resistir ante la opresión y luchar por nuestros ideales, algo que también se aplica a la construcción de nuestra gestión de gobierno”, agregó Milei, vinculando la festividad con sus postulados políticos.
Enfoque multicultural y espiritual
La ceremonia fue presidida por un rabino de la comunidad judía de Buenos Aires, quien condujo el encendido de velas y entonó las plegarias tradicionales de la festividad. Además, se compartieron alimentos típicos, como sufganiot (donas rellenas) y latkes (tortillas de papa), respetando las tradiciones gastronómicas de Janucá.
Según trascendió, Milei, quien ha mencionado en reiteradas oportunidades su interés por integrar valores éticos y morales en su gestión, habría expresado su admiración personal por varias tradiciones religiosas, incluyendo el judaísmo. De hecho, el mandatario suele citar textos y conceptos relacionados con distintas creencias en sus discursos públicos.
El evento también marcó un espacio para tender puentes con la comunidad judía local e internacional. Aunque no se trató de un acto público masivo, figuras representativas de la colectividad destacaron el gesto del presidente como un reconocimiento hacia las tradiciones culturales y religiosas del país.
Reacciones políticas y sociales
El encuentro en Olivos generó diversas reacciones en el ámbito político y mediático. Algunos sectores de la oposición lo interpretaron como un gesto simbólico positivo en un contexto de alta polarización política. “Celebrar Janucá con su Gabinete es una forma de enviar un mensaje de unidad y reconocimiento hacia la diversidad cultural del país”, señaló un referente del arco opositor.
Sin embargo, no faltaron críticas. Algunos sectores cuestionaron la realización de un acto de carácter religioso en un espacio oficial, argumentando la necesidad de mantener la neutralidad del Estado en cuestiones espirituales. A pesar de ello, el evento logró visibilizar la relevancia de ciertos valores universales, como la luz y la esperanza, en el contexto de desafíos sociales y económicos que enfrenta el país.
La festividad de Janucá y su significado
Janucá, que en 2023 se celebra del 7 al 15 de diciembre según el calendario gregoriano, conmemora un evento histórico ocurrido hace más de dos mil años: la recuperación del Templo de Jerusalén tras la revuelta de los macabeos contra los seléucidas, quienes habían impuesto el paganismo en el antiguo Israel. El milagro asociado a esta festividad es la duración de un día completo de aceite consagrado que permitió alumbrar el templo durante ocho días consecutivos.
La ceremonia del encendido de la menorá, consistente en prender una vela adicional cada noche durante ocho días, simboliza este hecho histórico. A su vez, Janucá también promueve valores asociados a la libertad religiosa, la resistencia y la identidad cultural, resonando con diversas comunidades alrededor del mundo.
Un mensaje hacia el futuro
En el plano político, el evento también podría interpretarse como un esfuerzo por parte de Javier Milei para establecer una narrativa integradora que trascienda las posturas ideológicas. “Aunque cada uno de nosotros provenga de trayectorias distintas, en esta noche queremos recordar que las pequeñas llamas de luz individual pueden generar un cambio colectivo”, concluyó el presidente antes de finalizar el acto.
De cara a un contexto político y social marcado por intensos desafíos, la celebración de Janucá en la residencia de Olivos subraya una búsqueda simbólica de equilibrio entre ideales políticos, valores espirituales y un mensaje de esperanza compartida.