A partir de 2025, la VTV en Buenos Aires cambiará: las inspecciones se realizarán desde el cuarto año de patentamiento, con frecuencia bienal hasta el décimo y anual después. Esta reforma busca optimizar recursos, pero genera preocupaciones sobre la seguridad vial, dado que se reducirán los controles en vehículos nuevos.
Modificaciones en los plazos de la VTV a partir de 2025
El sistema de Verificación Técnica Vehicular (VTV) en la provincia de Buenos Aires cambiará en 2025 con nuevos plazos de control. Desde el próximo año, los automovilistas deberán someter sus vehículos a inspecciones a partir del cuarto año desde la fecha de patentamiento, con frecuencia bienal hasta el décimo año, y luego de manera anual. Esta modificación busca optimizar los recursos y reducir la congestión en los centros de verificación.
Actualmente, la VTV en Buenos Aires debe realizarse al tercer año de antigüedad del vehículo o al alcanzar los 60.000 kilómetros, y repetirse anualmente. Con la reforma, los nuevos plazos flexibilizan el procedimiento para los propietarios, aunque también presentan desafíos de implementación y controles.
Las autoridades provinciales argumentan que la medida se fundamenta en la mejora de la calidad tecnológica de los vehículos modernos y en la necesidad de reducir la carga administrativa de los conductores. Sin embargo, persisten interrogantes respecto a su impacto en la seguridad vial y la capacidad de supervisión de las condiciones mecánicas de los autos con menor frecuencia de verificación.
El impacto en la seguridad vial y el control
La disminución en la frecuencia de inspección durante los primeros años del vehículo abre el debate sobre el control de las unidades en circulación. Mientras que algunos especialistas sostienen que los avances tecnológicos en los modelos nuevos reducen la necesidad de revisiones anuales, otros advierten que menos controles pueden derivar en mayores riesgos en las rutas y calles.
Países con sistemas similares han implementado estrategias de monitoreo complementarias, como controles aleatorios o la obligación de revisiones previas en caso de transferencia del vehículo. ¿Seguirá Buenos Aires ese camino para compensar la disminución de verificaciones en los primeros años?
Por otro lado, los talleres de VTV podrían experimentar una menor demanda en el corto plazo debido a la extensión de plazos, lo que llevaría a una reestructuración de los centros de control. Además, la fiscalización del cumplimiento de los plazos será clave para evitar que los cambios deriven en un parque automotor con menos inspecciones de lo necesario.
Reacciones y expectativas sobre la reforma
Desde el sector automovilístico, la noticia ha sido recibida con diferentes posturas. Algunos fabricantes y concesionarios ven con buenos ojos la medida, argumentando que los autos modernos tienen mayor durabilidad y menos fallas mecánicas en los primeros años de uso. En contraste, especialistas en seguridad advierten que la reducción de controles podría generar fallas no detectadas que impacten en la siniestralidad.
El desafío será encontrar un equilibrio entre la flexibilidad administrativa y la necesidad de garantizar un parque automotor en condiciones óptimas. ¿Podrá la provincia implementar medidas adicionales para compensar la menor cantidad de inspecciones y evitar riesgos en el tránsito?