Un fuerte temporal afecta a 14 provincias argentinas con intensas lluvias, ráfagas de viento y posible granizo. El SMN emitió alertas amarillas y naranjas, y recomendó precauciones por tormentas eléctricas. Las autoridades trabajan en operativos de emergencia para asistir a los damnificados y prevenir riesgos por inundaciones y vientos fuertes.
Alerta por tormentas en gran parte del país
Un fuerte temporal afecta a 14 provincias argentinas con intensas lluvias, ráfagas de viento y posible caída de granizo. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió alertas de nivel amarillo y naranja debido a las condiciones adversas que impactan a gran parte del territorio.
Las provincias bajo advertencia son Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, La Pampa, Mendoza, San Luis, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Entre Ríos, Corrientes, Chaco y Formosa. Según el pronóstico, las lluvias podrían generar anegamientos, mientras que el granizo y el viento amenazan con producir daños estructurales y caída de árboles.
Especialistas del SMN recomendaron a la población tomar precauciones ante la posibilidad de tormentas eléctricas y ráfagas que podrían superar los 80 km/h en algunas zonas. Además, se advirtió sobre la probabilidad de cortes de energía y reducción de visibilidad en rutas debido a la intensidad de las precipitaciones.
Consecuencias e impacto en la población
Varias localidades ya registraron daños a raíz del temporal. En Córdoba, calles anegadas y caída de árboles afectaron el tránsito vehicular. En Mendoza, granizadas provocaron pérdidas en cultivos, afectando a productores locales.
Las autoridades provinciales y municipales trabajan en la coordinación de operativos de emergencia para asistir a los damnificados y prevenir mayores riesgos. Defensa Civil y bomberos voluntarios continúan patrullando zonas críticas para evacuar a quienes se encuentran en peligro por la crecida de ríos y arroyos.
Mientras tanto, el SMN mantiene la alerta y actualiza los informes a medida que el temporal avanza. ¿Está la infraestructura preparada para responder a estas condiciones? ¿Cómo afectarán estos fenómenos a la producción agropecuaria y el sistema de transporte?