Javier Milei enfrenta un escándalo tras el colapso de la criptomoneda $Libra, que generó pérdidas de 250 millones de dólares a inversores. Investigaciones señalan vínculos entre su entorno cercano y los responsables del proyecto. La situación complica su defensa mientras la presión política y las denuncias aumentan, afectando los mercados.“`html
Escándalo cripto sacude al gobierno de Javier Milei: acusaciones, millones perdidos y vínculos comprometedores
El presidente Javier Milei enfrenta su crisis más grave hasta la fecha tras el colapso de la criptomoneda $Libra, que generó pérdidas por 250 millones de dólares a miles de inversores. El escándalo tomó fuerza cuando se reveló que un tuit del propio mandatario impulsó la fiebre por el activo digital, solo horas antes del desplome. Ahora, en medio de una investigación judicial y con múltiples demandas en su contra, Milei intenta distanciarse, pero las conexiones entre su entorno y los creadores de la moneda complican su defensa.
La red de complicidades detrás del fraude
El esquema sigue un patrón clásico en el mundo cripto: aquellos con información privilegiada vendieron en el punto más alto, dejando a los inversionistas minoristas con pérdidas millonarias. Entre los principales beneficiarios aparecen nombres cercanos al presidente, como el operador bursátil Mauricio Novelli y el inversor estadounidense Hayden Davis, quien afirmó haber dirigido la operación desde el inicio.
Documentos filtrados revelan que Novelli y Davis negociaban reuniones con Milei a cambio de pagos en criptomonedas. Ambos visitaron la sede presidencial en al menos dos ocasiones y se reunieron con Karina Milei, jefa de gabinete y hermana del mandatario. Aunque el gobierno insiste en que el presidente no tuvo injerencia, las pruebas dibujan un panorama difícil de ignorar.
El epicentro del escándalo fue una conferencia cripto en Buenos Aires, organizada por Novelli. Empresarios denunciaron que se les cobró hasta 50.000 dólares por un acceso exclusivo a Milei, aunque solo obtuvieron una foto grupal. Algunos fueron presionados a pagar aún más por reuniones privadas. Estas tácticas, junto con la venta masiva de tokens antes del desplome, refuerzan la sospecha de un esquema fraudulento diseñado desde dentro.
Colapso, acusaciones y presiones políticas
El desplome de $Libra fue instantáneo. Las billeteras que controlaban el 80% del token liquidaron sus posiciones en cuestión de horas, lucrando con 90 millones de dólares. Otras cuentas, creadas poco antes del lanzamiento, obtuvieron 33 millones adicionales, evidenciando que el derrumbe pudo haber sido planeado.
En medio de las críticas, Davis intentó lavar su imagen, asegurando que había recuperado 100 millones de dólares y que estaba dispuesto a devolverlos. Sin embargo, hasta el momento no ha cumplido. Mientras tanto, KIP Protocol, la empresa cripto usada como fachada, se desliga del fraude y denuncia haber sido manipulada por Novelli y Davis.
La controversia sacudió los mercados: la bolsa de Buenos Aires cayó y la justicia federal recibió una ola de denuncias. El escándalo se amplificó cuando fuentes filtraron conversaciones en las que Davis habría asegurado que “envía dinero” a Karina Milei, insinuando sobornos a la cúpula del gobierno.
Lejos de dar explicaciones, Milei mantiene su estrategia de desviar la responsabilidad y minimizar el escándalo. Cuando se le preguntó si algún funcionario cercano obtuvo ganancias con $Libra, esquivó la respuesta: “Eso no me corresponde a mí decirlo”. Pero mientras el presidente intenta cerrar filas, el caso sigue creciendo y amenaza con convertirse en su peor crisis política hasta el momento.
“`