Piden investigar el papel de un operador de Karina Milei en el escándalo de Securitas

El caso de los sobornos de Securitas, la empresa de seguridad que admitió haber pagado coimas millonarias para obtener contratos con organismos públicos en Argentina, ha sumado un nuevo capítulo: una presentación judicial solicita que Sebastián Pareja, un operador clave de Karina Milei en la provincia de Buenos Aires, sea citado a declarar en la causa que investiga la jueza Sandra Arroyo Salgado.

El pedido surge tras detectarse que Pareja, que ocupó la Dirección General Técnico Jurídica del Registro Nacional de las Personas (Renaper) entre 2018 y 2019, no fue mencionado en el dictamen fiscal del pasado diciembre. La omisión es llamativa porque, según el documento presentado a la Justicia, durante su gestión se habrían autorizado contrataciones irregulares con la filial argentina de Securitas y su intermediaria, MAC Servicios Empresarios S.R.L.

El escándalo de Securitas estalló el año pasado cuando la compañía sueca admitió ante la Justicia que había realizado pagos ilegales a funcionarios nacionales y provinciales para asegurarse contratos de vigilancia. El caso avanzó con la imputación de Pablo Santos, actual director del Renaper, aunque la investigación no se centra en su desempeño durante el gobierno de Javier Milei, sino en su paso por el organismo bajo las administraciones de Mauricio Macri y Alberto Fernández.

Ahora, el nombre de Pareja se suma a la trama. El escrito judicial sostiene que, debido a su cargo dentro del Renaper, tuvo acceso directo a la emisión de dictámenes jurídicos que facilitaron las contrataciones fraudulentas con Securitas y su intermediaria. Se argumenta que las prórrogas de esos contratos se hicieron de manera ilegal y terminaron beneficiando a empresas vinculadas a la multinacional.

El pedido de citación es impulsado por el periodista Christian Sanz en calidad de “Amicus Curiae”. Según su presentación, el operador de Karina Milei tenía la obligación de conocer las irregularidades y su omisión en la lista de indagados debe corregirse “para garantizar justicia”. En el entorno de Pareja, sin embargo, han optado por el silencio y no han respondido sobre su posible rol en el caso.

El trasfondo político agrega una capa de complejidad a la causa. Fuentes cercanas indican que Mauricio Macri sigue de cerca la investigación y habría empujado en las sombras la solicitud contra Pareja con el objetivo de sacarlo del juego en la interna libertaria bonaerense. Su relación con Karina Milei lo ha convertido en un hombre clave en el armado territorial del oficialismo, algo que no pasa desapercibido para aquellos que buscan disputarle espacio en el nuevo esquema de poder.

En paralelo, el escándalo sigue creciendo con nuevas revelaciones. Documentos filtrados sugieren que MAC Servicios no solo sirvió como intermediaria de Securitas, sino que habría actuado como un vehículo para desviar los pagos de coimas a funcionarios estratégicos en organismos públicos. Los investigadores sostienen que los fondos triangulados desde la empresa de seguridad eran retirados en efectivo y luego redistribuidos en distintos niveles.

Con el avance de las acciones judiciales, el caso podría generar un reacomodamiento en el tablero político. En el oficialismo, algunos reconocen que la distancia que Karina Milei ha tomado respecto de Pareja responde a una estrategia de contención ante el impacto de la causa. En la oposición, en tanto, ya comienzan a utilizar el asunto para desgastar al gobierno y exponer las contradicciones de la “lucha contra la casta” que pregona Milei.

Todo indica que el expediente de Securitas seguirá creciendo en volumen y en implicancias políticas. La clave estará en cómo se mueva Pareja en los próximos días y si su nombre termina dentro de las citaciones judiciales. Con la Justicia avanzando, los protagonistas de esta trama están bajo la lupa y el escándalo amenaza con sacudir nuevamente el escenario político.